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Mal gusto

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Mal gusto me recuerda siempre a Juan Antonio Cebrián, el mítico periodista de Onda Cero.

No porque él careciera de buen gusto, ni mucho menos… sino por una anécdota que os voy a contar.

«Corría el año…» jejeje… la verdad es que no sé qué año era, pero sí recuerdo, o creo recordar, que os hablo de un año entre 1997 y 1999. ¿Por qué esas fechas? Luego lo diré, para sorpresa de los que hayan nacido en plena era Internet.

El caso es que por esas fechas…

«El Cebri» – La rosa de los vientos en Onda Cero y Peter Jackson

Nada que ver con el mismo programa que se sigue emitiendo para aprovechar el tirón nostálgico de Juan Antonio. El actual no se lo recomendaría escuchar a nadie, y menos a quien en su momento fuera oyente del Cebri. Ahora es mera propaganda política y el nivel de los colaboradores, aún siendo muchos de ellos los mismos de antes, se ha desplomado. Me figuro que por exigencias del nuevo director, que llevará control ideológico de todos ellos. Y la pela es la pela

Pues bien, yo acostumbraba a irme a dormir escuchando la Radio, ahora escucho podcasts. Y de entre todas las emisoras, en los 90’s el Rey de la noche era Juan Antonio Cebrián. Cultura, Historia, Literatura, Ciencia, entretenimiento y para los más osados, hasta cosas de OVNIs y demás paranormaladas. A mi me cautivaba por la historia. Qué gran divulgador y cuántos podcasts habrán nacido después para rellenar el hueco que nos dejó.

Primero Turno de noche y después La rosa de los vientos

Y en una de esas madrugadas infinitas de mi carrera de Filología Italiana, terminé de estudiar. Me eché mi partidita de dardos saboreando un té (con la diana de pelo de camello y mis dardos de acero). Afición que cultivé en Inglaterra y practiqué hasta mediados de los 2000s. De hecho viajaba a Inglaterra con mi estuche de dardos para no usar otros cuando salíamos al pub. Eso se acabó con el 11S, como si un terrorista fuera a atentar con un dardo.

Pues bien, esa noche me metí en la cama y me puse a leer, y tras leer, allá sobre las 03:00 ó 04:00 va el Cebri y anuncia que se está filmando una película de El Señor de los Anillos.

Se me abrieron los ojos, miré al techo y subí el volumen de la Radio. Sí señores, y no es una peli, sino tres…

«Se está grabando una trilogía de El Señor de los Anillos en Nueva Zelanda», dijo Cebrián

¡Notición!

Ni que decir que no pegué ojo esa noche.

No ya por la excitación y la emoción, sino porque me fui al ordenador. Por entonces había uno en la casa y estaba en la salita de lectura del despacho de mi padre. Sí, sí, a esto me refería antes con lo de Internet. Sólo teníamos un ordenador en casa, y éramos afortunados. Y si queríamos meternos en Internet teníamos que enchufar el módem y esperar media hora para poder abrir una página Web.

Así busqué el primer tráiler de La Comunidad del Anillo

Y de ahí saqué un pantallazo de cuando están esperando a que entren los orcos de Moria en la sala de la tumba de Balin para ponerla de fondo de pantalla y allí estuvo hasta que cambié de ordenador.

Menudo rollo os estoy contando, ¿verdad?

Los lectores veteranos conoceréis mi estilo. Los que no ya veis cómo enfoco y cómo contextualizo las películas. El caso es que El Cebri dio una de cal y otra de arena: Se está grabando una trilogía de la obra de Tolkien, y el director es Peter Jackson. Ahí quería llegar.

¡Peter Jackson!

El director de Mal gusto

¿Veis cómo merecía la pena que tuvierais paciencia?

Por todo ese rollo estoy comentando Mal gusto. que si no ni de broma iba a meter yo una cinta de estas características en el fancine. Aunque ya puestos quizás termine incluyendo El vengador tóxico también.

Estos títulos no os dirán nada salvo que fuerais asiduos de los videoclubes y hubiera llegado un momento en el que había pocas novedades o las pelis que querías ya estaban alquiladas. Y te ibas a esas de ahí… las raras, entre las que estaban estas dos pelis.

Pues bien. Qué fastidio…

Un director de cine gore dirigirá El Señor de los Anillos

Eso rebajaba la excitación y la convertía en incertidumbre… ¿Qué nos espera? Daros cuenta que los amantes de Tolkien sólo teníamos El Señor de los Anillos de Ralph Bakshi, de 1978. Es decir… que estábamos acostumbrados a esa peli y, siendo mejorable, como lo era, tenía un regustillo romántico que desde esa noche temí que se desvaneciera por culpa de Peter Jackson.

Hay que ver esta peli, Mal gusto, para comprender el miedo que daban las noticias del proyecto: 90 minutos de «mal gusto» grabados, a ratos, con los amigos de su pandilla.

¿Y ese tío iba a dirigir las del Señor de los Anillos? Comprenderéis mi pánico. Sesos, cerebros, tripas, intestinos, corazones, todo casquería y sobredosis de cine inmundo que servía, y eso sí lo cumplía, para echarte unas buenas risas con los colegas. Porque estas pelis eran para verlas en pandilla, sin parar de reírte.

Creo que en el último párrafo he comentado, de sobra, toda esta peli. Pero me explayaré un poco más para justificar el título de la entrada.

Bad taste es una película hecha por aficionados

Costó 25.000$ y se filmó a ratos y a saltos, porque había que tener el dinero para grabar, y no siempre se tenía y tener a los actores. En su mayoría los amigos directos de Peter Jackson, pero algunos con menos tiempo libre que otros, o con sus malos rollos particulares, como un matrimonio que al principio de la peli interpreta a eso, a otro matrimonio y cuando van a grabar el final de la ficción se habían separado en la vida real. Y ponles tú a rodar esta peli gore de serie Z aguantando a tu ex.

El argumento resulta pueril, pero se ha repetido y se repetirá en la historia del cine hasta la saciedad.

Cuatro investigadores de la AIDS, Derek, Frank, Ozzy y Barry serán los encargados de dilucidar por qué ha desaparecido hasta el último vecino de la ciudad de Kaihoro, en Nueva Zelanda.

AIDS: Astro Investigation and Defense Service, AIDS. Mucho me temo que este acrónimo un pelín forzado, surgiera «a modo de gracia» jugando con las siglas para formar la palabra SIDA en inglés. Un tema delicado teniendo en cuenta que por aquel entonces estaba haciendo estragos entre la comunidad homosexual como os conté en Bohemian Rhapsody. Al fin y al cabo eran otros tiempos y estamos hablando de una peli de mal gusto, con mal gusto y una pandilla de gamberros por detrás de ella.

El descubrimiento no será halagüeño Han desaparecido a manos de unos extraterrestres. Lo que no sabrán estos investigadores es que los humanos han sido usados como carne humana para abastecer de carne a una franquicia de comida rápida intergaláctica, o comida basura, como prefiráis. Estos serán los primeros cuatro personajes en entrar en escena, junto con un quinto, que no es humano sino extraterrestre, uno que responde al nombre de Roger que es capturado y torturado, Sus gritos servirán de imán para atraer a otros extraterrestres que están por la zona que caerán ante Derek, quien cae a su vez, por un barranco, empujado por Robert.

Por cierto, como se quedaron sin actores el mismo Peter Jackson interpretó a dos personajes que, cosas del guion, terminan peleando entre ellos en una escena hilarante. Y no te das ni cuenta. Claro que también acompaña el contexto.

El día que la vi por primera vez estaba en casa de un amigo con toda la pandilla. Vimos Tygra, o «Fire and ice» de Ralph Bakshi, y después, del tirón, nos metimos entre pecho y espalda Bad taste y El vengador tóxico. Menuda colección, ¿verdad? Era un viernes y tras el entrenamiento de fútbol sala con los del equipo del Manzanares (que, por cierto, ganamos todo lo que se podía ganar en Madrid).

Como de costumbre, tras entrenar nos fuimos al Videoclub Prado y cogimos estas pelis

Y para casa de uno del equipo.

De verdad, una cosa es verla hoy, tras leerme, o tras conocer mundialmente a Jackson, o con Internet a mano, que puedes estar hablando de algo desconocido y buscarlo al mismo tiempo en el SmartPhone. Pero vista en su día, en un VHS, con la tropa de amigos comiendo pizzas y las patatas fritas del churrero del barrio… Partiéndonos de risa, carcajada tras carcajada, con los que empiezan a fumar saliéndose al balcón pero dejando la puerta abierta para seguir viendo la peli, los de dentro gritando a los que fuman porque entra todo el humo y una pila de pelis para ver encima de la mesa, con estos tres VHS, en esas circunstancias no es que no nos diéramos cuenta de que un personaje de Peter Jackson se enfrentaba al otro… es que ni sabíamos quién era Peter Jackson.

Lo importante eran las risas, y con el Vengador como colofón estaban garantizadas. He de deciros que Tygra no triunfó. La quitamos a media peli, aunque creo que no vimos ni un cuarto de hora. Pero yo me quedé las pelis para devolverlas y poderla ver, cosa que hice esa misma noche, ya de vuelta en casa, cenado, duchado y cambiado. Es verdad que las otras dos, con su toque gore, pueden caer de pie si las ves para eso, para pasar de todo y reírte. Pero para que te guste Tygra tienes que tener cierto gustillo por el género de la ficción medieval, o de Espada y brujería, y como yo era lector de Conan, y me encantaba Conan el bárbaro… pues en mi caso sí cuajó.

Volvamos a Mal gusto…

Entra en escena otro humano, un tal Giles, que va de un lado para otro buscando (a ver si me acuerdo bien) objetos para tómbolas solidarias, o para recaudar fondos para buenas causas. Será atacado por Robert, y tras huir en busca de ayuda llama a una casa en la que también hay alienígenas. Al rato le veremos metido en una olla con muchas verduras flotando.

Sin embargo a mi me parece que el peor parado será Derek, ¿os acordáis de él? Al que tiró Roger por un barranco. Pues no palmó, cayó en un nido de gaviotas y, eso sí, se golpeó el cráneo. Lo tiene abierto, literalmente, y una parte del mismo le cuelga dejando al aire su cerebro. De hecho, y hablo de memoria, creo recordar que recoge un pedazo del su propio cerebro y se lo mete a cascoporro dentro del cráneo. A lo largo de la peli veremos varias soluciones para evitar que se le abra el cráneo y se desparrame su cerebro. Ahora se pone un gorro para sellar la fractura.

Será ahora cuando Barry, Ozzy y Frank se adentren en la casa para infiltrarse entre los alienígenas. Y veremos qué comen, y cómo lo comen, y veremos, para más INRI, a uno de los tres humanos teniendo que compartir esa comida que incluye el vómito de Roger…

Ya vais entendiendo lo de «mal gusto»… ¿Verdad?

Aquí será cuando descubran que los extraterrestres nos quieren para abastecer de carne su red de restaurantes de comida rápida intergaláctica.

Rescatan a Giles, se enzarzan en un tiroteo, Derek reaparece en medio de un tiroteo y tiene que apretarse el cráneo con su cinturón porque ha perdido el gorro y sigue perdiendo trocitos de cerebro… Como veréis lo ideal para estar cenando pizza.

La cosa se empieza a precipitar y el jefe alien decide abandonar su forma humana para aparecer y lucir con su forma original: como el del poster de la peli. Ese que tanto se parece, por lo menos a mi me lo recuerda, o quizás sea un recuerdo algo forzado, a Morgoth, el orco que lidera el asedio a Minas Tirith en El retorno del Rey. Sin embargo Peter Jackson comparaba a Morgoth con El hombre elefante

Lo de Derek es de traca. Ahora le vemos armado con una motosierra rebanando extraterrestres y parando sólo, para recoger un trozo de cerebro alienígena que utiliza para reemplazar un trozo perdido de su propio cerebro.

Se produce una pelea final en la que los humanos van ganando terreno a los aliens que terminarán descubriendo la verdadera naturaleza de la casa que habitan: es su nave espacial. Huyen de la Tierra llevando a bordo al humano más peligroso, que se ha quedado atrapado en la nave y les dará el viajecito de vuelta a donde narices vuelvan estos bichos asquerosos y repulsivos.

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